(Artículo publicado en 2008 en La Verdad de Murcia)
¿Hemos avanzado desde entonces...?
Habrá quien piense, con sólo leer el título de este artículo, que están llegando las cosas de la enseñanza a unos extremos verdaderamente preocupantes y que sólo a base de amenazas de semejante calibre pueden hoy día los profesores hacerse con sus alumnos objetores. Pero no, no se trata de la tan buscada disciplina en las aulas ni de piezas de artillería bélica como recursos intimidatorios. Hablamos de otros cañones más pacíficos y didácticos...
La palabra cañón se usa también, desde hace un tiempo, para designar a un aparato que permite proyectar imágenes digitalizadas. Y como tal acepción, está a punto de ser recogida por el diccionario de la RAE, pues aparece ya en el avance de la vigésima tercera edición que se publica en Internet. Como ven, hasta el diccionario, tradicionalmente lento en admitir palabras que eran de uso común, va creciendo con los tiempos a un ritmo adecuado –progresa adecuadamente- . No podemos decir lo mismo de las aulas de los institutos, que siguen, más o menos, salvo honrosas y contadas excepciones, como las del siglo XVI: pupitres para los alumnos, mesa del profesor – sin tarima- , pizarra fija pegada a la pared y tizas, eso sí, de colores y anti-polvo. Insisto en lo de las pizarras fijas porque he descubierto en los institutos alemanes unas interesantes pizarras hidráulicas y articuladas en forma de libro, que se abren y cierran, en las que se puede escribir por delante y por detrás, que suben y bajan sin esfuerzo según la altura del que escribe en ellas, o según se van llenado de letras y números; y los bajitos no tienen que subirse en un silla si quieren escribir en la parte de arriba, ni los altos agacharse en postura incómoda si escriben en la parte inferior. Algo tan aparentemente simple como una pizarra puede mejorar considerablemente su uso si su diseño se va adaptando a las necesidades con el ingenio y los avances tecnológicos... Pues eso. Que aquí las aulas siguen ancladas en la época de fray Luis, y que las nuevas tecnologías no están integradas en la normalidad del siglo en que vivimos. Si un estudiantillo de la época de Alatriste apareciera de pronto en un aula de un instituto sólo encontraría diferente el material de las mesas y sillas, antes de madera y ahora de formica, y los colores. Lo demás, apenas ha variado. Es verdad que en los centros suele haber un par de aulas de informática con diez o doce ordenadores y otro par de aulas de audiovisuales, con una tele, un vídeo, una pantalla y un proyector de diapositivas. (Precisamente el aparato se va a utilizar presenta casi siempre serios problemas técnicos, casualidades de la vida). Pero el caso es que el uso de las nuevas tecnologías no está generalizado en la Enseñanza Secundaria. Tal vez por causa de las dificultades y limitaciones que hay que solventar para usar esas aulas especiales... (Si a los sesenta profesores que hay de media en un instituto se les ocurriera utilizar habitualmente los medios informáticos o audiovisuales en todas sus horas de clase se armaría un caos considerable y sería técnicamente imposible.) O tal vez porque muchos profesores aún confían más en los libros de texto y en su palabra que en el uso educativo de internet, de los CDs didácticos, DVDs interactivos y demás modernidades.
Así las cosas, leo estos días en los periódicos que los políticos de uno y otro partido se proponen, si ganan las elecciones, llenar los centros de ordenadores, hasta dos por cada alumno... ¿Podemos imaginar qué pasaría si llegaran 450 ordenadores a un centro como el mío, de unos 900 alumnos? ¿Quién se encargaría de tenerlos a punto? ¿Y tantas conexiones, cables, enchufes..., de dónde iban a salir? ¿Se irían actualizando con los meses, o en dos años estarían ya casi inservibles? Además, ¿garantizaría tal número de ordenadores el que se utilizaran como recursos didácticos en las distintas áreas, como apoyo a los programas?
Es mucho más rentable, para empezar, que los políticos piensen en los profesores y en las aulas, que vienen a ser como sus circunstancias, las de los profesores, me refiero. Sería mucho más eficaz y más barato un ordenador portátil por profesor –o por aula-, con su correspondiente cañón y pantalla para hacer partícipes a todos los alumnos, que quince ordenadores en cada una de las clases. En ese caso, sí que cambiarían las estrategias didácticas de las distintas asignaturas, y se incorporarían realmente las posibilidades de internet al aula. Porque lo que faltaba para completar los problemas actuales de la enseñanza son los alumnos siempre detrás de las pantallas de los ordenadores... Imaginen un nuevo caos que controlar diariamente: navegaciones indebidas, rutas indeseables, configuración de bromas y desconfiguración de programas, averías varias, mensajes inapropiados...
Respuestas
Hace muchos años, en una de las escuelas en las que trabajo, y antes de la irrupciòn del internet en la vida cotidiana y mucho menos en las aulas, yo querìa un televisor para la sala de Lengua, y pese a la buena argumentaciòn no lo logrè. La tecnologìa avanza, pero las escuelas y su organizaciòn interna siguen teniendo corte tradicionalista. Los logros son contar con una sala de proyecciòn y una notebook de la biblioteca y un aceitado mecanismo de organizaciòn para el uso de la sala, que no en todos lados ocurre y la perdida de tiempo es increible.
Saludos,
Ana.
Me parece razonable la propuesta, pues dotar de equipo a un mayor número de estudiantes implicaría un mayor costo de mantenimiento.
ESTIMADOS COLEGAS, considero que el uso de las tecnologías en las aulas es un factor importante que se debe considera. Sin embargo, como sabemos, en nuestros países la inversión en educación es lo último que se considera, sin embargo HABLANDO DEL USO DE CAÑONES...OPINO QUE ES UNA BUENA OPCIÓN, un recurso importante para motivar y mejorar el aprendizaje de nuestros alumnos, muchos se oponen y consideran que la mejora de la educación no depende directamente de estas herramientas, pero por experiencia propia PUEDO AFIRMAR QUE SÍ...y no solo el uso de los proyectores multimedia sino sobre todo la posibilidad de CONVERTIR ESTE RECURSO EN UNA PIZARRA DIGITAL INTERACTIVA de uso no solo del docente sino sobre todo DE LOS ESTUDIANTES...existen por cierto alternativas muy económicas y viables para hacerlo REALIDAD....Esta es nuestra experiencia
pdimontoya.blogspot.com
https://www.youtube.com/watch?v=H_6h098euQ8&feature=youtu.be
http://www.perueduca.pe/docentes/articulos-2012/pantalla-para-todos...
crmc74@hotmail.com
Llenar de portatiles el aula, no garantiza el mejoramiento de la calidad de la enseñanza y el aprendizaje. Lo que realmente garantiza el exito pedagógico es la formación profesional del docente "in situ", es decir en el aula de clase. Creo que debemos profesionalizar a los maestros en lo que estan haciendo en las aulas de clase, con o sin computador. Lo que ocurre es que se capacitan en TICs, se gastan importantes sumas en la formación y los maestrso llegan al aula de clase y hacen lo mismo de siempre. Así pasa con todas las formaciones, incluidas los postgrados. Ellos no llegan al aula de clase. De manera que si el maestro no se cualifica y hace en el aula de clase lo que debe hacer, es decir impulsar las capacidades de los estudiantes, desarrollar habilidades de pensamiento superior y critico, no se les estimula a realizar hipótesis, experiencias, retos, fomento de la creatividad, tendremos aulas llenas de aparatos apagados, métodos tradicionales y trasmisión de información. Vicente Benavides Casa de la Ciencia y el Juego Pasto Nariño Colombia
Su intervención en esta discusión, me parece que tiene buen argumento, es cierto, que la moyría de algunos maestros siguen la práctica del verbalismo por necesidad, aunque si tan sólo se invirtiera un poco de la iniciatvia personal sin que la escuela le asigne material porque a veces no tiene, sería como una superación personal a beneficio de muchos. tener la cercanía con los escolares desde presentación, e, stimulanod cretavidad para percibir los pryectos que se exponen y usar un cañón en el aula, para la mayoría de los alumnos rurales les sigue sorprendiendo y porpongo que las secretarías deberían distribuir televisoines de alta calidad para el uso de películas que acerquen y conozcan la cultura nacional y no estar encerrados en el contexto. San Luis Potosí.