Podemos ir por lo nuevo, pero de ese modo podemos perder mucho. Cuando se comenzó a  usar repetitivamente la palabra “innovación” aparecía una propaganda en Gran Bretaña muy inteligente que decía “Universidad de Cambridge, más de 600 años  de innovación”. Combinar lo antiguo y lo moderno, cuidar los valores, mantener ante todo viva la vocación y la responsabilidad docente, proteger el amor ante una profesión única y el amor con quienes uno puede ejercerla, resulta el marco prioritario en el cual se logre la investigación y así se enriquezca el aula, se eleve el nivel de sus contenidos, y tenga lugar la evaluación crítica  del proceso educativo y factores intervinientes.

Tenemos el grupo de “pensamiento iberoamericano…” en el que hay temas que pueden ser interesantes para este foro. Aquí adjunto unas ideas que siguen innovando por su honestidad, sabiduría y oportunidad. Las ha dicho hace un tiempo, un investigador de la educación, Paulo Freire. Esta suerte de guía educativa puede usarse como punto de partida para investigarnos reflexivamente. Una sugerencia es leer sus propuestas y compartir visiones y experiencias.

  1. Es necesario desarrollar una pedagogía de la pregunta. Siempre estamos escuchando una pedagogía de la respuesta. Los profesores contestan a preguntas que los alumnos no han hecho.
  2. Mi visión de la alfabetización va más allá del ba, be, bi, bo, bu. Porque implica una comprensión crítica de la realidad social, política y económica en la que está el alfabetizado.
  3. Enseñar exige respeto a los saberes de los educandos.
  4. Enseñar exige la corporización de las palabras por el ejemplo.
  5. Enseñar exige respeto a la autonomía del ser del educando.
  6. Enseñar exige seguridad, capacidad profesional y generosidad.
  7. Enseñar exige saber escuchar.
  8. Nadie es, si se prohíbe que otros sean.
  9. La Pedagogía del oprimido, deja de ser del oprimido y pasa a ser la pedagogía de los hombres en proceso de permanente liberación.
  10. No hay palabra verdadera que no sea unión inquebrantable entre acción y reflexión.
  11. Decir la palabra verdadera es transformar al mundo.
  12. Decir que los hombres son personas y como personas son libres y no hacer nada para lograr concretamente que esta afirmación sea objetiva, es una farsa.
  13. El hombre es hombre, y el mundo es mundo. En la medida en que ambos se encuentran en una relación permanente, el hombre transformando al mundo sufre los efectos de su propia transformación.
  14. El estudio no se mide por el número de páginas leídas en una noche, ni por la cantidad de libros leídos en un semestre. Estudiar no es un acto de consumir ideas, sino de crearlas y recrearlas
  15. Solo educadores autoritarios niegan la solidaridad entre el acto de educar y el acto de ser educados por los educandos.
  16. Todos nosotros sabemos algo. Todos nosotros ignoramos algo. Por eso, aprendemos siempre.
  17. La cultura no es atributo exclusivo de la burguesía. Los llamados «ignorantes» son hombres y mujeres cultos a los que se les ha negado el derecho de expresarse y por ello son sometidos a vivir en una «cultura del silencio».
  18. Alfabetizarse no es aprender a repetir palabras, sino a decir su palabra.
  19. Defendemos el proceso revolucionario como una acción cultural dialogada conjuntamente con el acceso al poder en el esfuerzo serio y profundo de concienciación.
  20. La ciencia y la tecnología, en la sociedad revolucionaria, deben estar al servicio de la liberación permanente de la humanización del hombre.

Estas son unas ideas enriquecedoras, pero pueden ser otras, pero lo que creo puede ayudar a dialogar es descubrir entre todos el sentido del proceso educativo, que se da a lo largo de la vida.

 Muchos saludos,

M C Patricia

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Respuestas

  • Es particularmente importante el punto 2. Debemos ubicarnos en el entorno en el que enseñamos. Dado que el aprendizaje es para la vida, tenemos que enmarcar los aprendizajes en la realidad que viven los estudiantes para que puedan aplicarlos de forma responsable. Centrémonos siempre en que formamos ciudadanos participativos que puedan aportar y ser productivos para la sociedad en general y específicamente para la comunidad en la que viven.

    Alfabetización significa aprender lo que necesito aplicar. No podemos quedarnos en principios teóricos que no representen un aprendizaje significativo o que no tengan una aplicabilidad real y efectiva en la sociedad. Alfabetización es aprender a aplicar los conocimientos para potenciar el desarrollo individual y social. Los conceptos políticos, económicos, culturales y hasta religiosos deben ser considerados para permitir un aprendizaje basado en la realidad de los estudiantes y que ese aprendizaje pueda ser utilizado eficientemente en el desarrollo de dicha sociedad.

    • Hola Ernesto Ezequiel,

      Muchas gracias otra vez por tus palabras sobre el proceso de alfabetizacion y educacion, que solo adquiere sentido en el marco de referencia vital del educando y en el anhelo de alcanzar una ciudadania libre y participativa.

  • hola! estoy totalmente de acuerdo con las líneas que enmarcas yo soy aún alumna me hubiese encantado estudiar para Docente, sin embargo las circunstancias de la vida me llevaron a recorrer otro camino muy distinto estudio Comunicación Política aun que cabe aclarar amo la Educación y pretendo ejercer el oficio docente más adelante. Coincido con lo que comentas pues te mencionaba soy aún estudiante y me ha tocado de todo como alumna desde docentes que justo siguen esta parte de concientización y diálogo, como los que inclusive se molestan por una opinión porque sienten les quitas autoridad si creo que hace mucha falta aún el entender esta parte del educar y ser educado Freire hace en sus obras una reflexión que a mi me parece exquisita por como maneja los conceptos y sobre todo los ejemplos...y por otra parte aun y a pesar de todavía los obstaculos que se pueden localizar en el área de la enseñanza y la docencia si enmarco que esta es una labor muy bonita, muy especial y a mi parecer es un don el poder trabajar con niños y desde luego con jovenes y que pena que muchos no lo comprendan y no se reconozcan como tal ante su labor.        

    • Hola Ana,

      Muchas gracias por enfatizar tan apropiadamente la tarea docente y el trabajo con niños y jóvenes. Por suerte, hay una comprensión consensuada y mayoritaria sobre la tarea docente como algo vital para una sociedad plena, en la cual el docente contribuye a la educación humana. Y ahí llegamos a tus estudios de comunicación política, a un aspecto a veces postergado,  que es el de una gran responsabilidad y rol para estimular al pensamiento maduro y moral sobre la política, en los ámbitos locales, nacionales y global.

      Muchos saludos,

      M C Patricia

  • Hola Ernesto Ezequiel,

    Muchas gracias por tu vision tan enriquecedora. Se trata justamente de evolucionar en el proceso educativo a traves de articular el saber que nos antecede y del que nos nutrimos, con las facilidades actuales para el acceso a la informacion, sin despistarnos en la busqueda del conocimiento a traves de un conocimiento genuinamente libre y critico, apartado de la frivolidad y la trivialidad.

    Muchos saludos,

    Patricia

  • Considero que la reflexión es muy interesante ya que innovación no significa abandonar una práctica para reemplazarla por otra. Más bien implica un desarrollo y adecuación permanente a las necesidades de aprendizaje de la sociedad.

    Al innovar buscamos mejorar procesos y aprendizajes, no reemplazar procedimientos. Es decir, esta no es la meta.

    La innovación en la educación supone buscar medios que mejoren el aprendizaje significativo y forme ciudadanos democráticos, con valores y participativos. Pero de ninguna forma abandonar la cultura o reemplazarla por nuevas costumbres. Si algo demuestra funcionar, debemos mantenerlo y mejorarlo.

    • Hola Ernesto Ezequiel,

      Muchas gracias por tu muy nobles palabras. Siguiendo tu argumento, la innovacion nunca puede ser un fin en si mismo. Los valores humanos, en cambio, si lo son y por ello deben cuidarse, y eso nos permite proteger lo esencialmente humano de nosotros mismos.

      Muchos saludos,

      M C Patricia

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